A primera vista, realmente parece que esto es una especie de fruta llevada en la parte posterior de un insecto.
Pero en una inspección más cercana, en realidad es una mariquita descansando sobre una flor, dando la bienvenida al sol después de soportar el frío de la madrugada y cubierta de gotas de rocío de la mañana. La imagen sorprendente fue capturada por el fotógrafo alemán Jens Kolk, que utiliza un lente macro para conocer de manera personal y de cerca a la acción.
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