La notoria Prisión Central Klong Prem de Tailandia alberga más de 7.000 prisioneros, 16% de los cuales son extranjeros de 56 países diferentes. Este gran número de extranjeros permite a la prisión de ser anfitrión de su propio torneo de la Copa Mundial cada cuatro años, en consonancia con el oficial de Copa Mundial FIFA 2010. La única diferencia es que el "Campeonato Mundial Tras las Rejas" comienza y termina un día antes.
Este año, " El Campeonato Mundial Tras las Rejas de Fútbol " cuenta con 18 equipos de siete jugadores que representan a países como los EE.UU., Italia, Francia, Inglaterra, Alemania, Sudáfrica, México y, por supuesto, Tailandia, para nombrar algunos.
La ironía es que los presos pueden elegir jugar del lado de cualquiera de los equipos que deseen, independientemente de su nacionalidad.
El primer partido tuvo lugar el 10 de junio y el equipo de México se enfrentó contra el equipo de Sudáfrica. Se compone de dos mitades de 20 minutos en una cancha de tamaño medio, con los presos en las líneas laterales donde pueden silbar vítores bajo la mirada vigilante de una docena de guardias. No hubo ganador de esta ronda (1-1), pero el ganador final de " El Campeonato Mundial Tras las Rejas de Fútbol "será recompensado con una maqueta trofeo de la Copa Mundial de la FIFA el 10 de julio.
El concurso, que se celebró también en 2002 y 2006, está diseñado para hacer mejores personas a los prisioneros para que después de su liberación, ellos se desempeñen mejor en la sociedad. "Nosotros pensamos en el deporte como una manera de rehabilitar y reformar los presos antes de reintegrarse a la sociedad", dijo el Departamento de Correccionales del director general Thanis Sriyapan.
Además los reclusos parecen disfrutarlo. "No es frecuente que lleguemos a disfrutar de cosas como esta", dijo Mitchell Blake, de 43 años, durante una entrevista con Noticias Mundiales de Australia.
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